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En un mundo donde la igualdad entre hombres y mujeres es cada vez mayor, y donde el mercado se adapta a las necesidades de las personas y no de los géneros, quizás esto te sorprenda: existen bicicletas específicamente fabricadas para mujeres.
En este artículo te contamos qué distingue ambos tipos de bicicleta, y qué ventajas te traerá comprar la adecuada para ti.
En lo primero que piensa un lector desatento frente a la frase “bicicleta de mujer versus bicicleta de hombre” es en la forma del cuadro: un cuadro con tubo superior en ángulo descendente se asocia a una bicicleta de mujer, mientras un cuadro con tubo superior con ángulo recto se asocia a una bicicleta de hombre. Diferenciar las bicicletas de este modo es resultado del modo en que se concibieron las primeras bicicletas para mujeres, y de cómo estos modelos se masificaron y asentaron durante los años.
Hoy en día, aquellos argumentos que se esgrimieron a principios del siglo XX para que las mujeres usaran bicicletas de cuadro con tubo superior en ángulo – el uso de largas y pesadas faldas, el pudor exigido a las damas, entre otros – dejaron de tener validez, y la forma del cuadro de la bicicleta se ha transformado en una mera elección. Es cada vez más común ver mujeres cuyas bicicletas tienen cuadros con tubo superior recto, y hombres cuyas bicicletas tienen cuadros con tubo superior en ángulo. ¡No hay reglas estrictas, importa que tú te sientas cómodo!
Ahora bien, que la forma del cuadro de tu bicicleta sea una elección no significa que las bicicletas recomendadas para mujeres sean idénticas a las bicicletas recomendadas para hombres. En promedio, los cuerpos femeninos y masculinos son diferentes: las mujeres suelen ser más bajas, calzar menos, tener caderas más anchas, hombros más estrechos, y una relación tronco-piernas distinta a la de los hombres (piernas proporcionalmente más largas y brazos más cortos).
El mercado ha desarrollado bicicletas que consideran todas estas características antropométricas típicas. Tomar en cuenta las características de tu cuerpo y las recomendaciones que los fabricantes hacen con relación a tales características, es vital para hacer de tus viajes una experiencia plena.
Siendo mujer, ¿cuáles son las recomendaciones al momento de comprar una bicicleta?
La primera pregunta que debes responder al comprar una bicicleta es ¿cuál es el tamaño del cuadro recomendado para tu cuerpo? Si revisas las páginas más importantes de venta de bicicletas encontrarás información detallada de esta información, y/o de las recomendaciones de altura vinculadas a cada tamaño de cuadro. Algo como lo que ves aquí:
Los cuadros más pequeños son los más recomendados para mujeres, mientras los cuadros de mayor tamaño se recomiendan en mayor medida para los hombres. Por supuesto, hablamos de generalidades; lo importante es tu estatura y no tu género.
Por otra parte, como ciclista experimentado – o menos experimentado – sabrás que la comodidad de tus viajes en bicicleta no depende sólo de haber elegido el tamaño correcto del cuadro. Al comprar una nueva bicicleta debes fijarte, al menos:
Todos los cuerpos son distintos, y aunque las características antes descritas funcionan como una generalización, el mayor beneficio de las bicicletas para mujeres es que trajeron al mercado una mayor amplitud en la oferta, facilitando que puedas acceder a un producto que se adecue a tu cuerpo y expectativas. Si vas a comprar una bicicleta, es más importante el largo de tus brazos que tu género, así que, si tus hombros son anchos, busca un manillar ancho, sin importar la sección de la tienda donde lo ubiquen.